Y van 3...

Hace tres años, no era un día como hoy: estaba a punto de conocer a una persona maravillosa.

Tuve un parto bello, intenso y maravilloso que con el correr del tiempo me ha dejado distintos tonos de gris en el alma, pero poco tiene que ver con mi pequeña Hada Madrina.

Habían pasado muchos , muchísimo meses desde que decidimos emprender por primera vez este camino y convertirnos en familia. Todo tomó mucho mas tiempo y mas conciencia de lo que había imaginado.

Embarazarse no fue fácil. Conservar un embarazo no fue fácil. Dos inicios de ser humano se formaron en mi y me abandonaron al poco tiempo.

Lloré, lloré por días, por semanas. Todo parecí alejano, eterno e inalcanzable.

Larga historia. En el proceso descubrí tantas cosas! Y aprendí que si bien no se si es “ por algo” que nos pasas las cosa en la vida, es Definitiva e indiscutiblemente “porque” suceden, que somos quienes somos.

Tengo clarísimo que no sería esta madre que soy hoy si no hubiera tenido que recorrer esa tremenda travesía para convertirme en mamá.

Pero sobre todo, tengo clarísimo que de no ser por todo lo pasado, por absolutamente cada detalle de la historia, no sería ésta , mi hija.

Ella es una muy especial y única combinación de nosotros, de nuestros genes, de las horas y los minutos, de las medicinas y las circunstancias. Es la mezcla perfecta de amor, deseo y fe. Una amalgama irrepetible de sueños y planes y locura… y de todo, y con todo y tras un embarazo laaaargo y lleno de contratiempos, llegó.

Nació hermosa y grande. El tiempo la ha vuelto mas bella y mas grande. Tanto como jamás imaginé.

Desde que llegó a mi vida, todo tiene otro color. Mi vida se pintó de Sienna profundo y colmó cada instante de magia.

Aprendí tanto! Mi pequeña maestra, llena de luz cada minuto de mi vida.

Es tan difícil conservar los momentos. Aun no puedo creer que ya pasaran 3 años.

En esos tres años ha pasado de ser una bebé de 3 kilos y medio y mucho cabello, cahetonsisima, nueva, blanca, vacía de información, más parecida a un costalito de ternura que a una peronsa… A ser ELLA.

Le llevó tres años aprender a usar las herramientas básicas que como padres le damos, sin saber, queriendo darle otras, para Ser, a través de ellas.

Y ahora, con modismos argentinos, gestos de papá, reacciones de mamá, palabras de la tele, historias de libros, ES, cada día un poco mas ella misma, dejándonos ver esa persona que siempre fue, desde el instante mismo de su concepción , pero que solo ahora vamos conociendo.

Es maravillosa. Es la niña mas lista, más dulce, mas amiga y compañera que existe en MI mundo.

Amo vivir juntas, crecer juntas. Descubrirla día a día y observar cómo ella descubre el mundo desde su perspectiva tan única, tan pura y Divina. Colmada de alegría, de vida, de rosa, brillos y lentejuelas! (porque es tan distinta a mi en esas cosas!)

Estoy profundamente agradecida de poder ser su madre en esta vida. Gran privilegio.

Cada día es una aventura. Trato de ser y hacer mi mejor esfuerzo, de la mejor manera, para ayudar a formar un ser humano libre de pensamiento, empático, valiente y sin prejuicios. Pero creo que ella es quién es y yo sólo puedo acompañarla y estropear lo menos que pueda su naturaleza. Y mientras, gozar , ser felices, respetar, divertirnos, hacer y deshacer…

Mi niña. Qué feliz me haces! Te amo. Felíz Día de Nacimiento .